Circular nº. 15

Madrid, 12 de julio de 2021

En la vida de comunidad,
María, con su amor y presencia activa de Madre y Hermana,
fortalece nuestra comunión con Cristo y entre nosotras.
(Const.art. 30)

Mis queridas Hermanas en Cristo y en el Carmelo:

¡Que nuestra Santísima Madre del Carmen nos cobije bajo su manto!

Estamos ya en el mes de gratitud a la MADRE por tanto amor que ella nos tiene y por los beneficios recibidos por su intercesión. Además, estamos en plena preparación a los días y fiestas muy ligadas a nuestra espiritualidad Carmelitana, la solemnidad de Nuestra Santísima Madre, la VIRGEN MARIA DEL MONTE CARMELO, patrona del Carmelo, y de nuestro PADRE SAN ELÍAS, padre espiritual de todos los Carmelitas.

Que estas celebraciones reaviven el fuego del Carisma en nuestro seguimiento a Jesucristo, viviendo las virtudes de María y el espíritu de Elías; ya que ellos son los modelos de nuestra vida consagrada, la pureza de corazón y de intimidad con Dios. Que la Virgen María y nuestro padre san Elías intercedan por nosotras, para que podamos permanecer firmes en el bien y ordenar nuestra vida según sus ejemplos. ¡FELICES FIESTAS Y FELICIDADES, Hermanas! Les deseo que disfrutéis mucho cada una en vuestra Comunidad en unión con toda la familia carmelita.

A través de este medio quiero comunicarles sobre dos fundaciones en estos últimos meses. La primera se realizó el pasado 31 de marzo de 2021, en Chimbote, la ciudad pesquera más grande del Perú, que está ubicada al Norte de Lima. La Comunidad “Estrella del Mar” está formada por las Hnas. Johana Baptista Surjani Nitidjaja, María Teresa Godoy García, María Helena Mude y Nadine Albornoz Chirinos.

Las Hermanas colaboran en la promoción humana, en la pastoral parroquial, educativa y sanitaria. Nada más llegar a Chimbote las Hermanas enseguida empezaron a asumir las labores pastorales en el centro médico de la obra social “Maternidad de María”, en el colegio “Mi Baúl de Talentos” y a colaborar en la animación de la catequesis familiar de la parroquia.

La segunda fue el 31 de mayo de 2021, en la Archidiócesis de Maceió, que se encuentra en el estado de Alagoas, ubicada en el nordeste de Brasil. Por fin, se cumplió el deseo de nuestras Madres Elisea Oliver y Teresa Bañón, de extender nuestra presencia congregacional en Brasil, que fue el primer intento misionero fuera de España. Sabemos de este hecho en dos de las cartas de Madre Elisea del año 1921, en las cuales comunicó a toda la Congregación sobre las seis fundadoras que partirían por el mar, a este vasto país de Sudamérica.

Para cada cosa tiene su tiempo y ya ha llegado la hora de nuestra presencia en el país donde yace nuestro querido co-fundador, maestro de novicias y primer director espiritual de nuestras Hermanas fundadoras, Padre Cirilo Font Puig, O.Carm.  Las tres hermanas que asumen esta misión de llevar a cabo y realizar el sueño de nuestras Madres son Hnas.  Lindalva Pereira Soares, Johanna Surbakti y Zelia Balduina Soares de Oliveira.

La finalidad de la Comunidad “Madre Elisea” en esta tierra de Santa Cruz, es: cooperar con la Fundación Juan Pablo II que tiene como finalidad la asistencia a los niños y adolescentes en situaciones vulnerables sociales y de drogadicción. Las Hermanas prestan servicios de acogida y asistencia psicosocial, emocional, espiritual y educacional desde la Casa M.ª Auxiliadora y en la Casa Don Bosco. Ellas también participan en la pastoral parroquial y vocacional.

Les ruego para que las encomendéis al Señor, para que todo sea a mayor gloria de Dios y el bien de las almas que se nos han confiado. Nos unimos todas con nuestra oración, apoyando a las Hermanas en esta obra de salvación a los chicos y chicas amados de Dios, en peligro de perderse sin la ayuda adecuada.

Hemos vivido momentos duros en este tiempo de pandemia. Estamos invitadas a mirar la vida, acogerla en todo lo que es como camino de este nuevo curso del 2021-2022. Vamos todas abrazar la vida desde la comunión eclesial e intercultural, la participación activa y la misión de nuestra familia religiosa, para comunicar el mensaje de Cristo; junto con san José, el patrón y el modelo de la vida carmelitana.

Les deseo que sigan teniendo un buen descanso de fin del curso, con todos los cuidados y precauciones posibles. A todas, recibid afectuosos saludos y abrazos con todo mi cariño. Bendiciones.

Fraternalmente en el Carmelo,