Encuentro de Formación Permanente 2015

Con la participación de 30 Hnas. de la Vicaría, tuvimos el Encuentro de Formación Permanente, el sábado 21 de marzo 2015, en el aula virtual de nuestro Liceo-Escuela “Ntra. Sra. del Carmen”, Santo Domingo.

El tema tratado fue “La Oración como cimiento de la Vida Fraterna”, visto desde nuestras Constituciones y Directorio.

El Equipo de Formación nos propusimos como objetivos: a) intensificar el sentido de pertenencia, profundizando en nuestras Constituciones, despertando la necesidad de seguir conociéndola más y mejor. b) Motivar nuestra vida de oración como cimiento o base de nuestra vida fraterna.

Iniciamos a las 10:00 a.m. con las palabras de bienvenida por la Hna. Ana Mercedes Sirí Rodríguez, vicaria regional, y, de inmediato en actitud de oración pusimos nuestro encuentro en las manos del Señor, dejando que hable el silencio.

Luego dimos la bienvenida de manera especial a las nuevas Hnas. de votos perpetuos que, responsablemente participaron

Compartimos el tema visualizando su contenido, el cual nos sirvió como “aperitivo” de motivación para luego continuar profundizándolo en cinco grupos, previamente programados y reflexionados en las comunidades.

Como estamos en el mes de la celebración del 124 aniversario de la Congregación organizamos los grupos con frases de M. Elisea:

  1. Alabado sea Dios
  2. Dios proveerá 
  3. Para El hemos nacido
  4. No tengas miedo a ser valiente
  5. La Providencia de Dios lo dirige todo por sus pasos, sin violencia.

Tanto la reflexión en los grupos como la puesta en común reflejaron la profundidad con que vivimos y compartimos cada momento. Se percibió la sintonía que el Espíritu nos transmitió. Todos los grupos de una u otra manera expresaron la necesidad de retomar la profundización y vivencia de nuestras Constituciones en cada comunidad.

Resumimos los compromisos expresados de esta manera:

  • Continuar el compromiso de leer las Constituciones diariamente, teniéndolas como referencia de vida personal y comunitaria. Que sean tema de reflexión en los retiros mensuales.
  • Reforzar y ser fiel a nuestro tiempo de oración personal y comunitaria.
  • Fomentar los detalles que favorecen la vida comunitaria, lugar de encuentro y crecimiento. Crear y ser expertas en comunión.
  • Fortalecer los vínculos fraternos tanto en cada comunidad como entre las comunidades cercanas.

Un detalle que destacamos es el “esfuerzo” que hicieron de manera especial, algunas Hnas., por encima de sus limitaciones de salud física, siendo las primeras en llegar tanto al inicio como después del almuerzo y pequeño descanso, para la puesta en común.

Al final, en la evaluación del día las Hnas. que se expresaron manifestaron se habían sentido muy bien, quedando motivadas para asumir los compromisos a los cuales se llegó en cada grupo.

Después de unas informaciones dadas al grupo y expresar nuestra gratitud, concluimos como iniciamos, unidas a nuestra Madre, con el canto del Magníficat.