Venerable Madre Elisea Oliver Molina

El 17 de diciembre de 1931, Madre Elisea cerraba los ojos a este mundo para abrirlos ante la faz misericordiosa del Padre. Le sucedió en el cargo como superiora general la Rvda. Madre Josefa Albert Vidal (1932-1951), que conoció y trató a Madre Elisea. Según el deseo de la Congregación, intentó incoar el proceso de canonización de la Sierva de Dios. De hecho, se dieron algunos pasos al respecto y en el año 1947 hay un intento formal de comenzar el proceso. Pero el 1 de septiembre de 1951 fallecía la Madre Josefa sin ver coronada su gestión con la apertura de la Causa.

Las diferentes Superioras Generales desde 1951 hasta 1990, fecha de apertura oficial de la Causa, prosiguieron en el mismo empeño basadas en el sentir de la Congregación y en los testimonios de personas que conocieron, trataron y convivieron con la SdD y que avalan su vida de radicalidad evangélica, vivida “en obsequio de Jesucristo” y rubricando su amor a Dios y al prójimo con su entrega generosa.

El proceso de canonización de la Sierva de Dios Elisea Oliver Molina se abrió oficialmente en la Diócesis de Orihuela-Alicante el 14 de enero del año 1990, y se clausuró el 14 de junio de 1992.

El trasunto del proceso diocesano fue entregado en la Congregación para las Causas de los Santos el 24 de junio de 1992. Cumplidos los trámites requeridos, el Relator, P. Cristoforo Bove, OMF, dirigió la positio. Finalizada ésta, se hizo entrega de la misma en la Congregación de los Santos en junio del año 2001, en espera del estudio de los teólogos que debían emitir su juicio sobre las virtudes heroicas de la Sierva de Dios. Dicho estudio tuvo lugar durante el año 2014. Finalmente, el 7 de junio del presente año 2016, en la Sesión ordinaria de Cardenales y Obispos para la discusión acerca de la Causa de beatificación de la Sierva de Dios, Madre Elisea Oliver Molina, el resultado de la votación fue positivo, con el reconocimiento de las VIRTUDES HEROICAS: las teologales (fe esperanza y caridad), las cardinales (prudencia, justicia fortaleza y templanza) y las virtudes anejas. Desde entonces, la SdD tiene el título de VENERABLE.

El 14 de junio el Sumo Pontífice autorizó la promulgación del Decreto sobre las virtudes heroicas de Madre Elisea. Por lo tanto, “oficialmente” es VENERABLE.

Por los testimonios de personas que conocieron y convivieron con la Madre Elisea en las distintas etapas de su vida, así como a través de las cartas que de ella se conservan, se puede deducir su anhelo de santidad, su interés por vivir y contagiar su profunda ansia de ser toda de Dios, entregándose como Cristo, al servicio de los hermanos necesitados.

En una de sus cartas dirigida a las Hermanas escribía: “Hijas mías; avivad la llama con oraciones, abnegación, obediencia, caridad, cumplimiento del deber y verdadero amor al que tanto os ama. Ánimo, pues y adelante. Yo no os deseo ricas ni con talentos, ni con otras mil condiciones que podría citaros; pero sí os deseo santas” (carta nº 67)

Madre Elisea vivió “en obsequio de Jesucristo” en la perspectiva de la sencillez evangélica: confianza en Dios Providente, humildad de corazón, vida comunitaria sencilla y sobria dedicada al servicio de los más necesitados. “Dios proveerá” fue su lema. “Alabado sea Dios”, la frase compendio de su vida.

Damos gracias a Dios porque se ha dignado “mirar la humildad de su Sierva” y ha hecho maravillas con los que, como ella, ponen en Él su confianza.

La Orden del Carmen juntamente con la Congregación de Hermanas de la Virgen María del Monte Carmelo, vinculada a la misma desde sus inicios, y los numerosos devotos/as de Madre Elisea en las diferentes partes del mundo donde es conocida, estamos de enhorabuena y vivimos con gozo esta feliz noticia: el reconocimiento oficial de sus virtudes heroicas. Pedimos al Señor y a Ntra. Santísima Madre del Carmen, por mediación de la Venerable Madre Elisea, la gracia de una vida santa y el gozo de verla pronto beatificada.

¡Alabat siga Dèu”!