Circular nº.25

                   Butare, 8 de septiembre de 2016

                                                                                          “Que se alegre tu Iglesia y se goce en el
Nacimiento de la Virgen María,
que fue para el mundo esperanza
y aurora de salvación”

(cf. Orac. desp. de la comunión, 8 de sep.)

 

Queridas Hermanas:

En el día de la Natividad de la Virgen María, recibid mi fraternal saludo desde la Casa Noviciado de la Vicaría de Rwanda–Burundi, donde me encuentro acompañada de Hna. Mª del Carmen Hernández, Vicaria General, realizando la visita canónica a las comunidades de esta Región. Como decía, en estas fechas estamos en el noviciado, y coincidiendo con nuestra estancia, se iniciarán hoy, día 8 de septiembre, siete jóvenes a la vida religiosa, “para que les enseñemos nuestro modo de vida y vean cuán suave es el Señor” (Cf. Ritual iniciación a la V.R.)

Estamos gozando mucho al comprobar cómo las hermanas trabajan y viven con mucha sencillez y generosidad su entrega al Señor. También se está viendo como fructifica el trabajo de la pastoral juvenil – vocacional, que en estos últimos años se está llevando a cabo con mucha entrega y seriedad, bendiciéndonos el Señor con copiosas vocaciones a nuestra Congregación. ¡Alabado sea Dios!

También hemos tenido la gran alegría de realizar la primera visita canónica a la comunidad de Ngozi (Burundi), última fundación que se hizo en esta Vicaría y que ya ha florecido con 2 nuevas vocaciones, que se unieron a las jóvenes rwandesas que comenzaron este año el aspirantado interno en nuestras comunidades apostólicas, y otras continúan su seguimiento externo desde la comunidad. Esperamos que el Señor siga enviando a nuestra Congregación muchas y santas vocaciones para la extensión de su Reino.

En esta fiesta de la Natividad de la Virgen María, a la que invocamos de forma particular en este Año Santo, como Madre de la Misericordia, nos acogemos a Ella y bendecimos al Padre por habernos entregado tanta ternura y amor, haciéndola Mediadora de todas las gracias, y a la que hemos de recurrir en nuestras necesidades, pues María , junto a su Hijo Jesús, intercede ante el Padre por nosotras, siempre que la invocamos: “Bajo tu amparo nos acogemos…”, “Acordaos, oh piadosísima Virgen María, que jamás se ha oído decir…”  Estas oraciones de la tradición cristiana, encierran en sí un profundo contenido teológico, que a medida que pasa el tiempo, nos parecen más hermosas y llenas de mayor significado; al menos eso me ocurre a mí.

Aprovecho para comunicaros que el lema del XX Capítulo General es: “Otea el Horizonte: aviva el fuego del carisma”. Quiero animaros en esta nueva etapa precapitular que estamos viviendo, a colaborar con responsabilidad y espíritu de fe, en todo lo que se nos vaya pidiendo, para la buena marcha de la Congregación, ante todo os estimulo a profundizar en las Constituciones y Directorio y en los temas que se envíen, para una mejor comprensión de nuestro carisma-misión y una apertura mayor a lo que la Iglesia y el mundo de hoy espera de nosotras.

Deseando a todas la bendición del Señor, esperando que la entrega y colaboración de cada una sea eficaz y produzca su fruto, os envío un fraternal y cariñoso saludo de nuestras hermanas de Rwanda-Burundi. Que María, nuestra Madre y Hermana en Carmelo nos acompañe siempre.

Con mi cariño y oración,